Las comunicaciones remotas en el mundo han marcado un antes y un después en la historia universal. Hasta el siglo XIX, fue totalmente imposible mantener una comunicación no escrita entre dos puntos. El telégrafo, con sus señales en puntos y rayas, vino a cambiar eso de manera definitiva.
No obstante, no fue hasta la invención y la expansión de la radio en todo el mundo que se dio un cambio sin posibilidad de ser revertido: la radio se volvió un vehículo de información e identidad de cada nación.
Guerras como motor de la expansión
La radio tiene muchos padres, porque hubo diferentes inventores en partes de toda Europa y Estados Unidos. Todo ello fue posible a raíz del descubrimiento de la teoría de las ondas electromagnéticas, lo que dio pie a algo grande. En las primeras décadas del siglo XX se consolidó la radio como invención y la BBC se fundó, pero no fue hasta las dos grandes guerras mundiales cuando la radio alcanzó su máxima expansión.
Aunque la tecnología estaba clara y desarrollada, faltaban los equipos y su difusión masiva. A raíz del desarrollo de las radios nacionales, especialmente durante la Segunda Guerra Mundial, la radio se convirtió en un eje vehicular indispensable para dar a conocer las noticias existentes y la evolución en todo el conflicto. Antes, en Europa, también la radio fue un eje indispensable para conocer la evolución de la Guerra Civil española.
Desarrollo en cada país
A raíz de la popularización de la radio, en cada país se comenzaron a crear estaciones de radio que solían estar adscritas a los gobiernos de cada país. El primer gran ejemplo fue la BBC en el Reino Unido, pero eso se fue replicando en toda Europa. En América, por su parte, el desarrollo fue más tardío y vino de la mano de empresarios y comerciantes privados.
En cualquier caso, el hecho de que la radio se difundiera en diversos pasíses del mundo permitió el desarrollo de este tipo de estructuras en cada ciudad. Ahora las personas en ciudades pequeñas, si disponían de una antena, podrían escuchar radio de las grandes ciudades. Incluso, con el desarrollo de la señal de onda corta, fue posible escuchar radios de otros países sin interferencia.
Competencia con la televisión
El problema de la radio comenzó con la llegada de la televisión y, especialmente, tras su popularización y comercialización de equipos. Muchos pensaron que los días de la radio estaban contados, pero en verdad, este medio se supo reinventar, al estar a disposición en los coches y también evolucionando hacia el sector musical.
Tras la llegada del Internet, la radio se ha mezclado totalmente con el mundo digital y, poco a poco, se ha acoplado entre transmisiones en vivo y podcasts.